Ahora todo es noche

La Zaranda Teatro reúne en Ahora todo es noche todo el universo creado a lo largo de sus 40 años de trayectoria. Moviéndose entre la crónica del esperpento, el expresionismo visual, el regusto por la tragedia, el humor desquiciado y un enfático compromiso poético. No hay nada parecido en la escena actual. Tradicionales y rupturistas, contradicción viva, contracorriente siempre. Siempre. Una compañía de culto que va aumentando de fieles acólitos con cada montaje litúrgico. Amén. En esta ocasión los jerezanos nos muestran un desolador recorrido alumbrado por tres mendigos en una inclemente noche buscando cobijo. La obra convierte a tres personajes como Segismundo, Prometeo y el rey Lear en indigentes que esperan encontrar un sitio donde pasar las tempestades de la vida. Los mendigos son ellos porque la historia es en realidad la autobiografía de La Zaranda después de cuarenta años. Lo esencial como propuesta estética. Lo existencial como propuesta discursiva. Desencriptando su esencia. Aquí está el universo de una compañía, sus heridas y cicatrices, su desarbolada imaginaría, su desgarrada voz, sus personajes desahuciados.