La Zaranda celebra con este trabajo 45 años sobre los escenarios de todo el mundo. Un nuevo capítulo imprescindible de uno de los equipos escénicos más creativos y originales del panorama escénico andaluz, nacional e internacional.
¿Y si volviera a la vida?, se pregunta uno de los personajes, olvidado en el fondo del espejo. Delante de él, un actor ha ido envejeciendo camerino a camerino, maquillando su íntima derrota, sus gastadas ilusiones, este desengaño que oscurece sus días. Han muerto tantas cosas que la vida no será lo bastante larga para olvidarlas. Pero hoy escucha estas voces dentro del azogue y es como si el alma volviera al cuerpo. En este presente estéril en el que el hombre no parece estar a la altura de sus sueños, con las últimas fuerzas, saldrá a irradiar esperanza al escenario.
Aliado con su personaje, removerá con su pasador las entrañas del teatro, topándose con sus vicios y virtudes, con su humanidad siempre. Bajarán a los infiernos, cruzarán dédalos donde los burócratas almacenan su tedio, sortearán los socavones que cubren las alfombras rojas de la fama, iluminarán las oscuras galerías donde la vulgaridad lo impregna todo, intentando liberar a Segismundo de una realidad alienante y prosaica, haciendo de Clavileño un Pegaso. De nuevo, desafiando la muerte y el olvido, buscarán la alegría del reencuentro con el teatro.
Manual para armar un sueño es una decidida oda a la esperanza que quiere poner luz a las tinieblas de un mundo hostil a todo el que escape a su comercio. Un viaje infinito a la historia y que, sin embargo, transcurre en el corto espacio que va de un camerino al escenario. Un sueño tan delgado como el hilo de una estrella que resiste todo tipo de tormentas.
Dramaturgia
Eusebio Calonge
Dirección
Paco de La Zaranda
Intérpretes
Francisco Sánchez, Gaspar Campuzano, Enrique Bustos
Espacio escénico
Paco de La Zaranda
Vestuario
Encarnación Sancho
Iluminación
Peggy Bruzua
Espacio sonoro
Torsten Weber
Ayudante de dirección
Andrea Delicado
Marketing y comunicación
Teatre Romea
Fotografía y cartel
Víctor Iglesias